XII FORO GRUPO DE TRABAJO Nº 3

MOUSSA SARR

Cambio climático y migraciones

MOUSSA SARR COORDINADOR

Quiero que mis primeras palabras sean de agradecimiento a la fun­dación Hugo Zárate, a su presidenta por su compromiso social y a todos sus miembros primero por la oportunidad que me han dado de poder asistir al XII Foro Ciudadanía y Sostenibilidad celebrado el 10 de Noviembre de 2007 como africano, y segundo por haber coordinado el taller Cambio Climático y Migraciones.

Muchas veces se habla de África en los foros, y los encuentros sin que los propios africanos puedan intervenir y aportar su visión en los temas que les afectan directamente y para mi esta invitación, demuestra los valo­res de respeto y igualdad que tiene la fundación para todas las culturas y sobre todo, la solidaridad que tiene hacia el pueblo africano con sus difi­cultades frente a las consecuencias del cambio climático.

También quiero agradecer la participación muy activa que hicieron todos los participantes del grupo del taller que estuve coordinando donde todos los y las participantes demostraron su rechazo a las políticas poco respetuosas del medio ambiente de los países industrializados.

Después de darnos a conocer y que cada uno haya demostrado lo importante que supone el foro para debatir sobre asuntos que preocupan toda la humanidad, la situación de África frente al cambio climático ha ocu­pado un lugar muy importante en los debates.

Si es cierto que el cambio climático es un asunto global que afecta a todos los países del mundo sobre todo los en vías de desarrollo común­mente llamados países del sur o empobrecidos etc… es también cierto que África es el continente más vulnerable al cambio climático. Sin embar­go hablar de las consecuencias del cambio climático sobre el continente africano puede ser una tarea muy difícil, primero porque África es tan gran­de que es imposible conocer en detalle el impacto del fenómeno y segun­do porque aunque que se sepa que el continente esta sufriendo las conse­cuencias del cambio climático no disponemos de todos de los datos refe­rentes.

A pesar de que el cambio climático es responsabilidad de todos los estados, gobiernos, empresas etc…, hoy en día el continente africano es el menos responsable del cambio climático, pero es el que está y que será más sacudido ya que es el menos preparado para afrontar las consecuen­cias derivadas del efecto invernadero.

Sequías más largas, ganado diseminado, bosques tallados y peleas entre agricultores y ganaderos que cada vez más hacen incursiones en los campos de cultivo para dar de comer al rebaño, es el espectáculo más común que se ofrece cada vez más a los que llegan al continente africano.

Sin embargo lo que aquí hay que recordar y en el que todo el mundo del taller han coincidido, es las responsabilidades que los países europeos han tenido en el pasado sobre la situación de muchas zonas del mundo, sobre todo en África y que sigue de algún modo perpetuándose en el tiem­po con el efecto del cambio climático sobre el continente.

A cambio de promesas que nunca llegan a aplicarse, muchos gobiernos europeos están llevando sus residuos más contaminantes al con­tinente africano comprometiendo así la sostenibilidad de los recursos natu­rales y poniendo en riesgo la salud de las poblaciones.

Además de estas responsabilidades gubernamentales esta también el papel de las multinacionales, que siguen expoliando las materias primas del continente africano, sin hablar de que sus actuaciones de explotación se hacen sin ningún tipo de respeto a las normas ambientales, contami­nando así un continente que ya esta arrodillado así como se menciono en el debate de grupo que tuvimos en el taller.

El efecto de esas actuaciones sobre la salud, y los desastres que pueden resultar de ellas se conocen. Hoy en día millones de poblaciones del Sur están abandonando su tierra de origen en búsqueda de una vida mejor y digna ya que los efectos del cambio climático sobre sus medios de sub­sistencia como la agricultura, la pesca o la ganadería son nefastos.

De allí que la única opción que queda es la migración hacia zonas más desarrolladas o donde al menos las condiciones de vida sean más posibles. Este tema fue quizás el que más capto la atención de los partici­pantes del grupo de taller por la situación difícil que viven los inmigrantes en la sociedad española que todos los participantes denunciaron.

Estas migraciones muchas veces acompañados de tintes dramáti­cos en las rutas del desierto o del mar, en los países de tránsito o de aco­gida, es el resultado de las restricciones de los países del Norte a la entra­da de estas poblaciones que las mismas actuaciones de los países del Norte han obligado a abandonar su tierra de origen en búsqueda de una vida mejor.

En el caso de África, son cada vez mayor el número de las migra­ciones hacia países del Norte como España, sea por búsqueda de oportuni­dades o por los efectos del cambio climático, sin embargo los países indus­trializados parecen no preocuparse por el continente africano, como lo dice Andreu Simas, directivo de la fundación New Economics. La precaria posi­ción de África frente al cambio climático pone en evidencia la complacen­cia de los países ricos cuyas emisiones de gases de efecto invernadero, van en aumento y que ni siquiera han cumplido sus pequeñas promesas de ayuda financiera.

En conclusión los participantes han coincidido en la necesidad para los países industrializados y desarrollados de disminuir el uso de los pro­ductos contaminantes y sobre todo, de reducir su nivel de bienestar que algunos calificaron de primera causa del cambio climático.

Además el grupo ha sugerido que los países industrializados por su responsabilidad en la contaminación del planeta y en la expoliación de los recursos de los países del sur, aportasen toda la asistencia a los países del Sur especialmente África, en la mejora de las condiciones de vida de sus poblaciones, a través de planes de desarrollo coordinados conjuntamente con los países africanos y para afrontar el cambio climático.