¿Y ahora qué queréis que hagamos?

¿Y ahora, qué queréis que hagamos? Nos hemos dejado la piel y el alma en tratar de encontrar un clima de diálogo, en intentar trasladar a los demás la visión del problema de una forma sosegada, en perseguir hacer pedagogía, contra viento y marea. ¿Y qué habéis hecho vosotros, vosotros que os denomináis izquierda republicana?

Los PGE no eran lo más deseable, pero contenían, dentro de lo posible, avances importantes, avances importantes para los ciudadanos en peor situación económica y social, también se incluyen los catalanes. Me pregunto de qué lado estáis, qué es lo que realmente defendéis. ¿Pensabais que no votar los presupuestos podía garantizar algo para los ciudadanos que están en la cárcel? ¿De verdad lo creíais?

Yo no me puedo creer que os lo creyerais, porque de ser así demostraría una miopía política absoluta, una ignorancia supina, una estupidez sin parangón. Y, puesto que no puedo alcanzar a creer eso, tengo que reflexionar que vais cuesta abajo y sin frenos hacia el conflicto, premeditada y conscientemente. Y queréis arrastrar a una ciudadanía que continúa cegada por la bandera y por una lucha que, con vuestra actitud, va a conseguir que no llegue a ninguna parte.

Una cosa es defender la autodeterminación, algo absolutamente legítimo, y otra es suicidarse delante de los focos y con testigos. Teníais la repulsa de la derecha – siempre la habéis tenido, eso es una obviedad – pero vais a conseguir obtener la repulsa de la gente de izquierdas, de todos esos que podían haber mejorado un poco su vida, de todos esos que tenían puestas sus esperanzas en que la legislatura concluyera con un gobierno que bloquease las despiadadas políticas de la derecha y sus expectativas

Habéis forzado la convocatoria electoral, y ya veis como está la cosa, aunque no haya que hacer demasiado caso a las encuestas, los resultados de las elecciones andaluzas hablan por sí solas.

Nos habéis llevado al precipicio, así nos habéis pagado los esfuerzos de una izquierda de talante dialogante y conciliador. Habéis dinamitado todos los puentes. Hoy la derecha brinda con champán vuestra decisión porque saben que vuestros compañeros irán a dar con sus huesos en la cárcel por muchos años, porque están convencidos  de que lograrán recuperar el poder y os aplastarán con su gran bota autoritaria.

¿Ahora, qué coño queréis que hagamos?

Víctor Chamizo
Artículo publicado en RompamoslosGrilletes