Grandes fortunas y altos ejecutivos españoles financiaron el nacimiento de Vox a partir del grupo ultracatólico Hazte Oír
‘Público’ desvela en exclusiva para España la nueva macro-filtración de WikiLeaks: 17.000 documentos internos de Hazte Oír y CitizenGo previos al despegue meteórico del partido de Santiago Abascal, incluidos los listados y aportaciones de los «grandes-grandes donantes» que hicieron posible el auge electoral de la ultraderecha.
La plataforma de filtraciones y protección de whistleblowers (alertadores) WikiLeaks vuelve hoy a la palestra (tras mucho tiempo de silencio por el encarcelamiento en Londres, bajo total aislamiento en solitario, de su creador, Julian Assange) con una publicación conjunta por medios de Italia (Il Fatto Quotidiano), Alemania (Taz), España (Público) y México (Contralínea), de miles de documentos internos y confidenciales generados por las organizaciones españolas de ultraderecha Hazte Oír y CitizenGo entre 2001 y 2017, en un proyecto que se denomina The Intolerance Network (La Red de Intolerancia).
Expurgados de todas las identificaciones personales protegidas por la Ley de Protección de Datos, y contrastados uno a uno por Wikileaks y por los medios que hemos colaborado durante meses en esta investigación, dos millares de archivos han sido descartados para mantener una biblioteca de unos 17.000 documentos, que incluyen campañas de propaganda y captación de fondos, instrucciones internas sobre la gestión de informaciones adversas, power-points, cartas dirigidas a socios internacionales y mucho más.
El material cubre tanto las actividades de Hazte Oír, fundada en 2001 por Ignacio Arsuaga Rato (sobrino tercero de Rodrigo Rato y amigo íntimo del líder de Vox, Santiago Abascal), como de CitizenGo, que puso en marcha el mismo Arsuaga en 2013 como plataforma internacional de su organización y ha extendido sus operaciones a medio centenar de países, con sedes permanentes en 15 ciudades.
Entre lo más destacable de toda esta base de datos figuran las tablas de Excel con todos los donantes que financiaron el nacimiento y crecimiento de esta plataforma internacional ultracatólica, tal como reza su Guía para Comunicar en Situaciones de Crisis (cuyo borrador de 2014 llevaba marca de agua como «Confidencial»):
«HazteOir se financia única y exclusivamente con las aportaciones y donativos de sus socios y de las personas que desean ayudarnos» […] «tiene casi 7.000 socios, más de 20.000 colaboradores y más de 400.000 simpatizantes».
Millonarios para financiar el Congreso Mundial de Familias
Sin duda, los Excel estudiados por los que hemos participado en esta nueva exclusiva mundial de Wikileaks muestran pequeños donativos de miles de personas, que quedan registradas con sus direcciones, correos electrónicos y teléfonos. Pero además de los muchos ciudadanos corrientes que aportan cuotas, destacan numerosos millonarios y altos ejecutivos, entre los que hay grandes fortunas que no son socios pero aportaron muchos miles de euros para acontecimientos como el Congreso Mundial de Familias de 2012, año en que por primera vez se celebró en España ese World Family Congress (WFC) anual que organiza el estadounidense The Howard Center for Family y reúne al núcleo duro de las asociaciones ultra-católicas de todo el mundo.
En 2017, ese WFC tuvo lugar en Budapest, con la participación e intervención del ultraderechista primer ministro húngaro, Víctor Orban, y al de 2019, que se celebró en Verona, asistió el entonces vicepresidente del Gobierno italiano y líder de la neofascista Liga Norte, Matteo Salvini.
Aquel año 2012 en el que el WFC fue organizado en España por HazteOír, el listado de «grandes donantes» incluye a 800 personas que aportan unos cientos de euros cada una, pero en ese mismo Excel hay una segunda página, identificada como «Grandes Grandes Donantes» en la que figuran 209 contribuyentes a las finanzas de la organización ultra-católica, con aportaciones de miles de euros, y donde saltan a la vista algunos nombres más que conocidos, como los de Esther Koplowitz (FCC), Isidoro Álvarez (El Corte Inglés) o Juan Miguel Villar-Mir (OHL).
Aquí abajo reproducimos el principio de ese listado, donde hemos tachado los nombres de todos los que no tienen una clara relevancia pública, así como todos los datos personales de teléfonos o direcciones (los que restan, corresponden a las sedes corporativas de las compañías que dirigen las personalidades correspondientes):
Inicio del Excel de Hazte Oír denominado “Grandes Grandes Donantes” con motivo del Congreso Mundial de Familias y la Marcha por la Vida (antiabortista), ambos actos de 2012. — Wikileaks
Del Grupo Eulen a Esther Koplowitz y Villar Mir
El primero de la lista, por haber contribuido con 20.000 euros al Congreso Nacional de Familias, es David Álvarez Díez, propietario del Grupo Eulen (un imperio multinacional de servicios externalizados con más de 84.000 empleados en una docena de países) que falleció en 2015 y dejó a sus siete hijos enzarzados en una guerra familiar sin cuartel por el control de ese holding, con unos ingresos anuales que rondan los 700 millones de euros.
En segundo lugar (con 10.000 euros de donativo) aparece Esther Alcocer Koplowitz, marquesa de Peñalver, presidenta en ese momento de Fomento de Construcciones y Contratas (FCC), y dueña de hoteles Ritz en diversas ciudades del mundo, cuya fortuna estimaba Forbes en más mil millones de euros antes de la pandemia.
La misma cantidad que Esther Koplowitz donó para el ultraconservador Congreso Mundial de Familias el ya fallecido Isidoro Álvarez, quien fuera presidente de El Corte Inglés, tras suceder a su tío Ramón Areces. En cambio, Juan Miguel Villar-Mir, exministro de Hacienda y dueño entonces de la constructora OHL y muchas otras grandes empresas, contribuyó a esa misma iniciativa con la mitad: 5.000 euros.
Del estudio de las diferentes hojas de cálculo de los grandes donantes que contribuyeron a la expansión de Hazte Oír, base sobre la que se alzarían después los cimientos del partido Vox y sus éxitos electorales, se concluye que fueron muchos los multimillonarios que participaron en el auge de la ultraderecha española. Por ejemplo, en esta misma hoja de Excel aparecen otros donantes importantes de ese año, aunque sean menos conocidos.
Más de 17 millones de euros en donaciones
Entre ellos, Bernard Meunier (consejero delegado de Nestlé Península Ibérica en 2012, quien ascendió el pasado marzo a vicepresidente ejecutivo de Nestlé S.A., así como director de Negocios Estratégicos, Marketing y Ventas de la multinacional suiza); Ignacio Esquer De Oñate (secretario del Consejo de Administración de Fertiberia, con cargos en otra decena de empresas); o Javier Javaloyes (de Agencia Negociadora y el Grupo Reacciona).
Más adelante en el listado figuran otros altos ejecutivos como Luis Vilaclara Pont (apoderado o administrador de una decena de empresas inmobiliarias).
Son los dos centenares de donantes de ese nivel los que permiten que Hazte Oír cierre el año 2013 con un presupuesto de casi dos millones de euros. Ese año, el entonces ministro del Interior de Rajoy, Jorge Fernández Díaz (hoy imputado en la causa Kitchen por la destrucción de pruebas sobre la Caja B del PP), firmó la resolución que dotaba al lobby ultraconservador, con su plataforma internacional CitizenGo, de los beneficios fiscales de una «asociación de utilidad pública», y a partir de entonces las donaciones crecieron hasta sumar en total más de 17 millones de euros.
Arsuaga pidió 100.000€ a un oligarca ruso
Carta de Arsuaga al oligarca ruso Maloféyev, pidiéndole 100.000 euros. — Wikileaks
El impulso financiero de esos millonarios españoles se combinó con otras aportaciones de magnates extranjeros, como se demuestra con la carta que mostramos, fechada en París el 4 de abril de 2013, en la que Arsuaga pide una contribución de 100.000 euros al oligarca ruso Konstantín Maloféyev, fundador del fondo de capital riesgo y banca de inversión Marshall Capital y presidente del grupo de medios de comunicación Tsargrady; un think tank de extrema derecha que mantiene estrechas relaciones con el lobby ultra-religioso de EEUU y que contrató al productor Jack Hanick, de Fox News, para crear en 2014 Tsargrad TV, un canal integrista ortodoxo.
En su misiva en inglés, encabezada «Dear Mr. Malofeev» (grafía inglesa del apellido ruso), Arsuaga le agradece haberle permitido presentarle personalmente el proyecto CitizenGo, del que espera que «se convierta, en tres años, en el sitio web más influyente de la movilización internacional de inspiración cristiana». También informa al magnate ruso de que «ya hemos encontrado a dos donantes que se han comprometido a ayudarnos a impulsar CitizenGo con 170.000 euros (218.000 dólares USA). Pero aún así nos quedamos cortos en 258.000 euros para financiar el proyecto completo».
«Espero de verdad que esté usted interesado en participar en el lanzamiento de este proyecto con una contribución inicial de 100.000 euros».
Abascal despegó con el apoyo ultra en Europa
No cabe duda de que las aportaciones de multimillonarios a las arcas de CitizenGo lograron convertir esa plataforma ultra-católica en un motor internacional de impulso a los partidos y organizaciones de extrema derecha, en vista de su rápida extensión y consolidación en cincuenta países. Algo que también propulsó el despegue de Vox, tras sus fracasos electorales iniciales en España, en el ámbito europeo a partir de su participación en la cumbre de la derecha “euroescéptica” de 2017 en Coblenza (Alemania), donde Abascal estableció contacto directo con la francesa Marine Le Pen, el holandés Geert Wilders y la alemana Frauke Petry, entre otros líderes de potentes partidos ultras.
Sin embargo, las relaciones entre Arsuaga y Abascal empezarían a complicarse tras los grandes éxitos electorales de Vox (2018 y 2019) y sus acuerdos con PP y Ciudadanos para formar un Ejecutivo derechista en la Junta de Andalucía y apoyar los gobiernos regionales de la derecha en Madrid y Murcia. Así que en agosto de 2019 Hazte Oír anunció su ruptura con Vox como respuesta a la marcha atrás de Abascal en su exigencia de derogar las leyes LGTBI: «Se han vendido muy barato», proclamó Arsuaga.
En realidad, Abascal también estaba intentando independizarse de Hazte Oír, una vez ya liberado de la hipoteca de su apoyo económico a través de los generosos donantes de CitizenGo, para alejarse del descrédito que suponían las crecientes pruebas de que Arsuaga formaba parte de la cúpula de la sociedad secreta integrista El Yunque, como explicaremos en el próximo capítulo de esta exclusiva.
Carlos Enrique Bayo
Artículo publicado en Público