Acampada propalestina en la Universitat de València: «Animamos a que se pongan en pie contra el genocidio»
Los protestantes reclaman el fin de las relaciones de España con Israel mientras dure la guerra. Multitud de ciudadanos han mostrado su apoyo, aportando material, comida y dinero.
En el jardín de acceso a la Facultad de Filosofía de la Universitat de València florecen las tiendas de campaña desde hace unos días. El movimiento estudiantil inició una acampada en solidaridad con Palestina el pasado 29 de abril, siendo la primera en España y la cuarta en Europa. Por el momento, no parece que vaya a tener una duración definida.
Tanto la asamblea inicial como la acampada han sido impulsadas por los colectivos BDS País Valencià (Boicot, desinversió i sancions) y Estudiants per Palestina, sumándose a la creciente respuesta universitaria y movilización en otras partes del mundo.
«Hicimos un llamamiento a las asociaciones que sabíamos que vendrían seguro, por no hacer un llamamiento público y que nos impidieran la entrada», relata Esther Monge Hernández, miembro de ambos colectivos. La joven relata con gratitud el enorme apoyo que han recibido desde que lo anunciaron a todo el mundo. «Ya no solo de la gente que quiere acampar o participar públicamente en las actividades, sino de población que se acerca a preguntar, a informarse y a darnos las gracias», añade.
En un comunicado, los colectivos han señalado que se trata del genocidio «mejor documentado audiovisualmente por sus víctimas y sus genocidas, el más grave que hemos vivido en nuestra vida y el que peor habla del Atlántico Norte por su complicidad con el régimen de apartheid israelí». Por este motivo, han decidido pasar a la acción y esperan que se unan más campus a sus peticiones concretas.
A la movilización se han acercado también algunos ciudadanos para dejar material, ropa, comida e incluso dinero para mantener viva la protesta. «Esto va a ir a más», aseguran, «animamos a la gente a que se ponga en pie contra el genocidio».
Mucho más que una reivindicación
«Dormimos la primera noche 48 personas», comenta Irene Jorde, estudiante de Filosofía y Derecho y encargada de la caja y la comida en la acampada. Si bien el miércoles bajó ligeramente la presencia, el jueves por la noche volvieron a rozar las 50 personas. Es durante el día cuando la afluencia de gente es mayor, incluso con la presencia de familias con niños para organizar actividades. «Podríamos decir que aún estamos en proceso de constitución«, explica la estudiante
El planteamiento inicial es el de acampar de forma indefinida. La organización, duración y demás se van dilucidando en asambleas diarias. «Nos mantendremos aquí hasta que la Universidad decida pronunciarse o nosotras consideremos que se ha cumplido lo que pretendíamos», asegura Jorge.
La acampada exige que España ponga fin a la compraventa de armas y las relaciones con Israel, además de que se sume a la iniciativa sudafricana en el Tribunal Internacional de Justicia de la ONU, recuperando la jurisdicción universal y poniendo fin a la persecución y criminalización de la solidaridad con Palestina. Asimismo, los colectivos piden acabar con la ley mordaza y de extranjería.
Por otro lado, los protestantes piden a la Universitat de València un compromiso claro, firme y escrito de no firmar ningún acuerdo o convenio con instituciones israelíes, hasta que no terminen los crímenes contra el pueblo palestino, así como la violación sistemática de sus derechos. Por otro lado, reclaman que es necesario rescindir las relaciones con empresas consideradas como cómplices de estos crímenes. En concreto, citan a «HP, Agua Eden, Banco Santander o AXA», entre otras.
Por su parte, la Institución ha recalcado en un comunicado que las reivindicaciones van más allá de sus competencias, no mantiene acuerdos de colaboración con universidades israelíes y ha pedido un «alto al fuego inmediato y permanente» en Gaza.
Un movimiento global
Los mensajes de apoyo, algunos de ellos llegados incluso desde Gaza, les animan a seguir adelante con su reivindicación. «La ciudadanía valenciana se ha volcado con nosotras, se me pone la piel de gallina. Es espectacular», añade Irene.
El grupo de estudiantes reflexionan en las asambleas acerca de lo que está ocurriendo en otros países. Se consideran afortunados, ya que, en lugares como Francia o Estados Unidos, las protestas se reprimen con el uso de la fuerza. “Es desalentador, porque si ves las noticias, se te quitan las ganas, te entra miedo”, confiesa Irene Jorde. Y añade que esa forma de actuar se convierte en una herramienta de desmovilización.
«Este movimiento ha surgido en Estados Unidos, estamos viendo como han sufrido una gran represión», afirma Monge. «Estamos todo el movimiento estudiantil juntos, unidos, para apoyar a Palestina. Necesitamos mantener esa unión, esa colaboración para derribar al régimen genocida de Israel».
Las pancartas se acumulan en la zona ajardinada de la Facultad. El movimiento de gente es constante, sobre todo por las tardes cuando se celebran las asambleas. «La imaginación toma el poder, como decían en mayo del 68», comenta el profesor Ramos.
«Hay una ilusión enorme, aunque sea un momento terrible y doloroso para el pueblo palestino, pero la solidaridad es la versión política del amor y es lo que aquí estamos manifestando», añade.
Alicante se une a la movilización
La gran mayoría de las personas que protestan son jóvenes estudiantes, que buscan que su mensaje se replique en otras universidades, pero también en cualquier ciudad del mundo. “Queremos que se pongan en pie contra el genocidio”, reclama Monge. Y añade que pretenden dar un valor añadido a su acción, generando «un espacio de divulgación y debate para que se pueda comprender bien la causa palestina, se entienda el contexto y salga la gente formada».
Un grupo de estudiantes de la Facultad de Letras de la Universitat d’Alacant (UA) se suma a la movilización iniciada en Valencia, convocando una acampada indefinida desde el lunes 6 de mayo con el mismo objetivo: el alto al fuego en Gaza, el reconocimiento internacional de Palestina y el cese de las relaciones y ventas de armas entre España e Israel.
La protesta, que empezará por la mañana delante de la biblioteca de Filosofía y Letras, pretende repetir la fórmula de las acampadas que se han llevado a cabo las últimas semanas en los campus universitarios de Estados Unidos.
A esta nueva reivindicación también se unen los colectivos AUPA (Asamblea Universitaria por Palestina Alicante) y BDS PV. Estos últimos han convocado una ‘bicicletada’ simultánea en Alicante, Valencia y Castellón para el sábado 4 de mayo, que en la capital alicantina saldrá a las 12 horas desde la plaza de Toros.
Además de las reclamaciones relacionadas con Gaza y Palestina, los convocantes también reivindican los derechos de los estudiantes que han participado en acampadas y protestas en sus universidades en solidaridad con el pueblo palestino.
Publicado en rtve