Diez Soluciones para un escenario de Plástico-Cero
El mundo ha producido más plástico desde el año 2000 que en todos los años anteriores juntos. Y en 2016, un tercio terminó en la naturaleza y sólo el 20% fue reciclado. A este ritmo, se espera que la proporción de residuos plásticos en el océano se duplique para 2030.
Estos son algunos datos del último informe de WWF, publicado el 5 de marzo, en el que la ONG dibuja un escenario para un mundo plástico cero en 2030.
Un día antes, el 4 de marzo, François-Michel LAMBERT, (Ecologista – UDE) presentaba un informe titulado “No a la contaminación plástica”. donde plantea 49 propuestas para alcanzar la meta de “cero aceite plástico en 2040”, es decir, dentro de 20 años.
La primera propuesta es poner en orden de batalla a todas las partes interesadas, con medios dedicados, para acompañar las políticas públicas, mediante la creación de una Agencia Nacional de Plásticos (ANP) sobre el modelo de la Agencia Francesa de Biodiversidad ” Todas las políticas voluntarias de los actores económicos en el sector han fracasado. Esta Agencia Nacional de Plásticos pretende ser un lugar de consulta, con un volumen de negocios amplio, un comité científico y fondos de intervención sustanciales, para que la sociedad y la industria salgan de esta trampa mortal. Esta agencia pretende volverse internacional porque la contaminación plástica es global”, según Lambert.
Entre las otras 48 propuestas, Lambert propone fortalecer el sistema de depósito, crear un mercado dedicado a la contaminación plástica y química, y definir cada 5 años una lista de prohibiciones de uso de plástico no compostable, entre otras.
Pero ambos documentos establecen algunas soluciones coincidentes que te resumimos aquí:
1) Prohibir los plásticos de un solo uso.
Platos, cubiertos, hisopos de algodón, pajitas, bastones de bebida: todos estos productos desechables se prohibirán a partir de 2021. Su eliminación reduciría la demanda de plástico en un 40% para 2030 y la producción de residuos en un 57% en comparación con el escenario del status quo.
2) Establecer un precio para el plástico que incorpore el costo real de su ciclo de vida.
El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) estima que el costo del capital natural del plástico es de $ 8 mil millones al año. Por ejemplo, la contaminación plástica tiene un impacto en el turismo y la pesca debido a la muerte de los animales. WWF estima que más de 240 especies ya han ingerido plástico.
3) Recoger el 100% de los residuos plásticos.
El escenario Zero Plastic de WWF planea recolectar el 100% de los desechos plásticos y reciclar el 60% para 2030, gracias al diseño de productos fácilmente reutilizables y reciclables. Se podrían crear más de un millón de nuevos empleos.
4) Animar a la gente a volcarse al reciclaje.
Lambert propone un crédito fiscal para las empresas que producen materias primas recicladas. Actualmente, la cadena de suministro produce cinco veces más plástico virgen que plástico reciclado porque la industria del reciclaje no es rentable.
5) Distribución libre de impuestos de objetos plásticos.
Cualquier compañía que ponga un artículo sin plástico (no biodegradable) a disposición de un consumidor de forma gratuita debe pagar un impuesto sobre cada artículo distribuido.
6) Lanzamiento de Estados Generales de Embalaje.
El 40% del plástico producido se utiliza para empacar nuestros alimentos, nuestros objetos cotidianos,… El embalaje es la principal fuente de uso del plástico, antes de la construcción y el sector automotriz.
7) Recuperar antiguas costumbres.
Para ello, sería necesario generalizar el uso de productos a granel, instalar fuentes públicas, crear una etiqueta “Sin plásticos” para las diferentes tiendas y restaurantes y apoyar el surgimiento de redes de contenedores retornables.
8) Definir un presupuesto de plástico.
¿Por qué no imponer un límite a la cantidad de plástico emitida en cada mercado nacional y definir un presupuesto de plástico a semejanza del presupuesto de carbono para las emisiones de CO2? Así se establecería un mercado de derechos comerciales de plásticos.
9) Crear una Agencia Nacional de Plásticos.
Sería el garante de una estrategia a cinco años para prohibir ciertos productos plásticos no compostables y adoptar nuevos estándares contra los microplásticos.
10) Adoptar un acuerdo internacional vinculante.
Los gobiernos podrían adoptar un tratado internacional legalmente vinculante para detener la contaminación plástica, estableciendo objetivos nacionales para promover la reducción, reutilización y reciclaje de plásticos. Al mismo tiempo, se podría crear un grupo de expertos intergubernamental en plásticos para localizar mejor las fuentes y los impactos de las contaminaciones.
Artículo publicado en Ágora
