El colegio Ballester Fandos de València se “renaturaliza”
El proyecto Natural[ment] es un refugio climático con el que, si se extiende al resto de escuelas, la ciudad podría ganar hasta 6.000m2 de espacios verdes
El CEIP Ballester Fandos de la Malva-Rosa de València ha concluido una completa semana de actividades en la que se ha avanzado en la transformación de parte de su patio para renaturalizarlo y convertirlo en un refugio climático, con diferentes espacios. Para ello, de 13 al 18 de noviembre hubo jornadas de plantación de árboles y de herbáceas; charlas de educación ambiental; talleres de coeducación; cuentacuentos; yincana sobre clima y energía y de actividades ecosociales; pinturas murales y montaje del bibliopatio; asambleas de alumnado y de familias; y comida de convivencia. En estos días continúan las actuaciones físicas.
El director, Vicent Ripoll, afirmó en la última jornada que, tras 31 años en el centro, ha visto “nieve, inundaciones, temporales y cómo se ha pintado la fachada cinco veces”, pero nunca una “semana tan bonita e increíble” como esta, en la que el alumnado se ha involucrado en el diseño y elaboración del nuevo patio y en la que “se ha rescatado la participación de las familias”. En un árbol en el que cada asistente podía dejar constancia de qué escuela queremos, él confesó que había escrito: “Me gustaría una escuela donde se experimente la felicidad. Una escuela donde los niños no sean felices, no es una escuela”. Otro mensaje hablaba de “una escuela libre de odio y con valores humanos”.
Las familias agradecieron la implicación del profesorado del CEIP Ballester Fandos en el “desarrollo personal” de sus hijos, una diversidad en el centro que “enriquece” e incluso una madre dijo que a su hija le gusta tanto que “quiere ir al cole”. Una exprofesora del centro que estudió en un colegio privado admitió: “Aprendí mucho de ortografía y de cálculo mental, pero nadie me enseñó que se podían cambiar las cosas. Tenía que aceptarlo todo con una sonrisa. Es importante que los niños aprendan a participar y a cambiar aquello que no les gusta”.
Mucho más que un refugio climático
El proyecto colectivo de innovación Natural[ment]. El pati renaturalitzat com a catalitzador del canvi ecosocial, coordinado por Fent Estudi, se enmarca en la estrategia Missions València 2030 y cuenta con el apoyo de Las Naves y el Ayuntamiento de València. Con él se ha creado un refugio climático en el patio para reducir las altas temperaturas con zonas con tierra y vegetación. Esto contribuye a generar un bienestar ambiental y lograr un confort térmico, pero también es promotor de salud y garantiza el contacto con la naturaleza. Asimismo, es un espacio coeducador y de buena convivencia; de juego libre e igualitario, alejado de espacios altamente masculinizados como las canchas de fútbol; promueve la participación del alumnado y de las familias; y está conectado con el entorno, el barrio y su comunidad.
La renaturalización de un patio es esencial para la creación de refugios frescos en un contexto de crisis climática, pero también es clave para aplicar una pedagogía basada en la experiencia, en la codocencia y en la presencia de juego, que es la principal herramienta de aprendizaje en la infancia. Será un pilar más dentro de la transformación en la que está trabajando el CEIP Ballester Fandos, ya que hasta ahora, ya tenían cuatro vías abiertas: huertos escolares ecológicos; un proyecto de ahorro energético con sensibilización; reciclaje; y la creación de una comunidad energética solidaria con la cual el centro será autosuficiente y donará los excedentes a familias con vulnerabilidad energética.
Metodologías innovadoras
El maestro coordinador del proyecto de investigación e innovación educativa del CEIP Ballester Fandos, Jose Carrasco, explica que emplean “metodologías para crear un aprendizaje donde el razonamiento y la motivación sean los elementos principales para la enseñanza”. Algunos ejemplos: en Ciencias trabajan en proyectos, con temáticas que escoge el propio alumnado o determinados conceptos en el huerto; en Lengua Castellana siguen un aprendizaje basado en cuentos, con el que tratan la gramática o la ortografía a través del análisis de un libro; y participan en LÓVA, La Ópera, un Vehículo de Aprendizaje, donde se trabaja la creación de una compañía de teatro y de un musical en directo, entre otros proyectos.
“Las lenguas pueden desarrollarse a través de un libro. La gramática, la comprensión y la expresión, con noticias de la semana. Intentamos ser curricularmente más libres, no seguir un libro y estar más en consonancia con lo que demanda la sociedad. Es importante romper la carga de un currículo a través de un libro de texto”, añade Ripoll.
El patio renaturalizado, un proyecto piloto para replicar en el resto de València
Para todos estos proyectos, la configuración física del patio escolar es determinante. Un patio lleno de asfalto y con una pista de fútbol ocupando buena parte de su superficie no da el mismo juego que uno con huerto, árboles, tierra, juegos variados o espacio de lectura. Jose Carrasco defiende los beneficios que tiene la renaturalización del patio para el alumnado, como “el uso de metodologías activas que propician el habla, el razonamiento, la investigación y que son abiertas a trabajar fuera del aula”; “acercar al alumnado a la naturaleza, con todos los aprendizajes directos que tiene”; o “hacer y diseñar actividades diferentes que propician el pensamiento individual y colectivo para resolver un reto”.
Asimismo, cree que “trabajar en un entorno fuera del aula ayuda a asimilar los nuevos conceptos de una manera más fácil, porque todo lo que se practica, se razona y se manipula se aprende, mientras que las cosas que se estudian, no se manipulan y están alejadas del alumnado, se olvidan”. El director, Vicent Ripoll, subraya que ha sido “un proceso de transformación real” en el que han “cambiado no solo el aspecto físico del centro”, sino que se han “empoderado al alumnado, familias y comunidad del barrio”.
El proyecto Natural[ment] pretende que las actuaciones en el CEIP Ballester Fandos sean un ejemplo replicable en el resto de la ciudad, con el objetivo de que se cree una red de refugios climáticos en los colegios de València. Con ello, se estima que se podrían ganar hasta 6.000 metros cuadrados de espacios verdes. Los resultados de las mediciones de temperatura han evidenciado que los entornos renaturalizados en los patios escolares ayudan a bajar hasta 15 grados la temperatura en el exterior, por lo que es una medida esencial en un contexto de crisis climática.
Publicado en El Periodic