Feministas socialistas crean una asociación autónoma para marcar las políticas de Sánchez
La nueva plataforma combate la autodeterminación de sexo al considerar que socava la lucha por la igualdad
El debate interno en el feminismo, atravesado por las discrepancias en torno a la autodeterminación de género o sexo, y la decisión del Gobierno de Pedro Sánchez de dar luz verde a la ley trans, ha decidido a las socialistas feministas a dar un paso al frente con la creación de una asociación propia e independiente para defender la “agenda de la igualdad”. Un paso al frente con el que se pretende marcar e incidir en las políticas del Ejecutivo.
La Asociación Española de Feministas Socialistas (FeMeS) se presentó hace unos días en sociedad en Madrid y está presidida por Amelia Valcárcel, catedrática de Filosfía, consejera de Estado y referente del feminismo en España. En la organización de la asociación participan profesionales que han tenido un papel impulsor en las políticas de igualdad de los gobiernos socialistas en España. Altamira Gonzalo, Kiti Blat, Inma Moraleda, Rosa Peris, forman la ejecutiva y entre las vocales figuran Alicia Miyares, Yolanda Besteiro, Lourdes Muñoz o Soledad Muruaga.
Amelia Válcarcel, catedrática y consejera de Estado, es la presidenta de Feministas Socialistas
En su presentación inicial se indica que la asociación nace “con el fin de alcanzar la igualdad real y efectiva entre mujeres y varones”, se subraya la necesidad de defender los derechos humanos de las mujeres y el cumplimiento de la agenda abolicionista (abolición de la prostitución, de los vientres de alquiler, abolición de género y de cualquier forma de apropiación y explotación del cuerpo de las mujeres). Se hace mención expresa a la conciencia de clase y a la necesidad de defender los derechos de las mujeres que viven en situación de pobreza extrema.
Más de 300 mujeres se habían incorporado ya el jueves a esta asociación con una importante participación de militantes y dirigentes socialistas que buscan con esta plataforma dar un nuevo empuje al debate feminista. La aprobación de la ley trans en el 2021 por parte del Consejo de Ministros presentada por la ministra de Igualdad, Irene Montero, en contra del criterio de la vicepresidenta Carmen Calvo, marcó un punto de inflexión para muchas feministas socialistas.
La abolición de la prostitución, de los vientres de alquiler y cualquier forma de explotación del cuerpo de las mujeres son ejes de la agenda
Consideran que el derecho a la libre autodeterminación del sexo registral pone en jaque la lucha para la igualdad. Partiendo de que uno de los objetivos del feminismo es la abolición del género entendido como un constructo cultural que impone papeles y roles en función del sexo, como el conjunto de construcciones normativas que construyen el sexismo, se ha subrayado por activa y por pasiva que la legislación –aún ha de debatirse en el Congreso- es un ataque a la igualdad.
La asociación expresa la conciencia de clase y subraya la lucha por las mujeres que viven en situaciones de pobreza extrema
Militantes socialistas junto a diferentes asociaciones feministas ya salieron a la calle el pasado mes de octubre para denunciar que el Gobierno y el presidente Sánchez han dado la espalda a la agenda feminista. La nueva asociación es un paso más en esta apuesta por incidir desde una plataforma independiente, con un margen de maniobra más amplio que en las estructuras del partido, en las políticas de igualdad.
En su agenda política también se destaca la lucha por una democracia paritaria, el derecho a una vida libre de violencias, el derecho a la salud sexual y reproductiva y, entre otras cuestiones, la defensa de que las mujeres tengan una vida laboral y profesional sin discriminación por razón de sexo.
Cristina San Barcelona
Publicado en La Vanguardia
marzo 10th, 2022 at 12:17 pm
No tengo nada claro lo que defienden con lo de «aboliciôn de género» y no me gusta esta gran divisiôn que han provocado dentro la lucha feminista. Intuoque, detrás de todo ésto lo que se esconde es una lucha por el poder y el protagonismo político, que hasta el momento del gobierno de coalición lo ostentaba el colectivo «Mujeres Progresistas» (sector feminista del PSOE) y ahora, lo tiene el de Podemos. Con esa, forma de actuar, no sólo se está copiando el modelo masculino de hacer Política, sino lo que es más grave, le están dando a Vox argumentos para su discurso en su negacionismo de la necesidad de políticas de género y de igualdad. Este 8 de Marzo, a los voxeros les dolerán las manos de tanto frotárselas.Un gran error y una pena, conmigo que no cuenten.