Introducción Diciembre 2025
Son muchas más de la docena de uvas, las que necesitamos para formular nuestros deseos para el año 2026. Sabemos que es un planteamiento utópico, pero es que no queremos prescindir de la Utopía y también reivindicar la Esperanza:
- Fuera todas las guerras, pero todas, todas y en todo el Planeta, que consiguen el enriquecimmiento de unos cuantos países con la fabricación armanmentista. .
- No a la confrontación entre religiones que solo buscan los enfrentamientos bélicos.
- Abajo los líderes populistas y en ocasiones, criminales.
- Stop a las medidas contra la inmigración que provocan un clima social falso, insolidario, inhumano, que la criminalizan y no refleja los beneficios que nos trae la inmigración
- No a la desigualdad entre mujeres y hombres y en todos los aspectos de la vida.
- Basta de comportamientos machistas, asquerosos e indignos de muchos hombres, más si tienen responsabilidad públicas.
- Fuera la corrupción en todos los estratos de la vida, política, empresarial, personal…
- No a la Justicia que no lo es y sirve a determinados intereses.
- Stop a todas las políticas intervencionistas contra la Naturaleza y quienes atentan al medioambiente y cambio climático.
- Fuera la manipulación e intereses urbanísticos que imposibilitan a los jóvenes y no tan jóvenes, el acceder a una vivienda digna.
- No a la falta de rigor y verdad de muchos medios de comunicación, que sólo sirven a determinados poderes.
Y seguiriamos…
diciembre 30th, 2025 at 7:15 pm
Este texto no habla de sueños imposibles, habla de cosas básicas. De vivir sin miedo, sin odio y sin trampas. Llamarlo utopía quizá sea una forma de protegernos, pero en realidad es puro sentido común ya que nadie debería ganar dinero con la guerra, nadie debería usar la religión para enfrentar a las personas, nadie debería gobernar desde la mentira o el desprecio.
Lo que se pide es sencillo de entender, respeto, justicia, igualdad y humanidad. Que las personas migrantes no sean tratadas como un problema, sino como lo que son: personas que aportan. Que mujeres y hombres tengan los mismos derechos de verdad, y que se acaben comportamientos machistas que avergüenzan a toda la sociedad. Que la corrupción no sea una costumbre y que la justicia no mire hacia otro lado según a quién juzgue.
También se pide algo tan básico como cuidar el planeta, poder acceder a una vivienda digna y tener medios de comunicación que informen con honestidad, no al servicio de intereses ocultos. Nada de esto es exagerado: es lo mínimo para una convivencia sana.
Seguir deseando todo esto no es ingenuidad, es responsabilidad. La esperanza no es cerrar los ojos, es negarse a aceptar que las cosas no pueden cambiar. Ojalá 2026 nos encuentre un poco más conscientes, un poco más solidarios y con menos resignación.
Feliz año 2026 !!.