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La ilustradora que imaginó un corazón enorme para quemarlo en las Fallas de València

Marina Puche, la primera mujer en diseñar la falla del Ayuntamiento de València, asegura que siente presión pero no más que “otros años plantando falla en secciones más pequeñas”

Marina Puche (Valencia, 1982) hace historia este año en las Fallas de València, aunque por sus maneras y su discurso casi no lo parezca. Sabe que ahora habrá niñas que puedan decir eso de “quiero ser artista como ella”, porque, sin presumir, empieza a ser un referente. Protagonizó titulares en la prensa local hace unos meses cuando el Ayuntamiento de València anunció que su boceto, firmado a cuatro manos con Manolo García Lleonart, se convertiría en la icónica falla municipal de 2023.

Estos días trabaja en la exposición que inaugurará el día 3 de marzo en el Centro del Carmen de Cultura Contemporánea sobre su obra, revisa los ninots de la falla que se plantará el día 15 de marzo y no pierde de vista sus otras disciplinas, pues dibuja retratos, diseña joyas y pinta, pinta mucho. Es lo que aprendió en su infancia, siendo hija y nieta de artistas falleros y de lo que sigue nutriéndose hoy en día. “Mi padre me sigue acompañando, aunque está jubilado”, explica.

Su diseño «Cardioversió valenciana» se inspira en una operación de corazón a la que sometieron a su padre, reconocido artista fallero

Tanto, que el boceto que se convierte estos días en los talleres de València en una enorme falla de vareta será un corazón gigante después de que a su padre le hicieran una cardioversión, un tratamiento para pacientes con arritmias que permite devolverle a este su ritmo regular normal.

La naranja será elemento destacado en el monumento de Marina Puche

La naranja será elemento destacado en el monumento de Marina Puche

“Se le había dado muchas vueltas en casa a esto, y cuando me contaron que realmente hacen que el corazón se pare, que tienen un momento en el que no funciona realmente y de repente, pensé que era como el tiempo que hemos vivido de pandemia. Es como el volver a renacer”, explica.

Pensé que la cardioversión del corazón era como el tiempo que hemos vivido de pandemia. Es como el volver a renacer»

La falla tendrá 20 metros de altura y destacará en ella el corazón, de 10 metros. Está hecho completamente de madera, con la especialidad de vareta, lo que promete una «Cremà» limpia, blanca y tradicional, aunque no se haya renunciado al corcho en algunos ninots. La madera también ha disparado precios en este último año.

El taller de Manolo García en el que se elabora la falla diseñada por Marina Puche

El taller de Manolo García en el que se elabora la falla diseñada por Marina Puche

Puche detalla como “toda la falla está envuelta también de ese concepto”, con un estilo diferente que ha imprimido desde el primer momento. Sus vivencias nutren sus diseños, que tienen en su mirada un aroma distinto. “Es verdad que las Fallas, como todo, están más contadas por hombres, y en esta falla a lo mejor se nota menos que en otros trabajos que he hecho anteriormente, pero puede ser que haya una sensibilidad un poco diferente”.

Se refiere al monumento que diseñó en 2022 para Latorre y Sanz en la comisión Pizarro-Cirilo Amorós, una falla que hablaba sobre los pelos corporales y que está segura “un hombre no hubiera contado igual”. Por aquella propuesta consiguió el premio de la Federación de Ingenio y Gracia.

En el taller, Puche observa dos 'ninots' de la falla municipal

En el taller, Puche observa dos ‘ninots’ de la falla municipal

La “Cardioversió valenciana” que saldrá a las calles este mes de marzo también será una falla participativa, pues se abrió un proceso para que los ciudadanos aportaran ideas acerca de qué les hacía tener «el corazón contento». De las 160 aportaciones, las seleccionadas se tradujeron en diversas escenas de las que han seleccionado “las más emotivas”, que acompañarán al enorme corazón que ya se observa, por piezas, en los talleres de Manolo García, donde Marina Puche entra y sale cada día.

La “Cardioversió valenciana” que saldrá a las calles este mes de marzo será una falla participativa, pues se abrió un proceso para que los ciudadanos aportaran sus ideas

En su taller, ubicado en un coworking de la Ciudad Fallera, sigue trabajando sobre estas propuestas y otras, como por ejemplo los diseños que plasma en su marca Manitas de plata, compartida con su hermana. Joyas con estilo naíf que vende incluso en la tienda del Museo Thyssen. “Se puede vivir del arte, mírame a mi… pero hago mil cosas, eso sí”.

La de mayor proyección se quemará el 19 de marzo en València, pero antes habrá sido objeto de todas las miradas. “No me asustan las críticas, sé que habrá a quien le guste y a quien no. En eso consiste». De todas maneras, asegura que siente la misma presión que “otros años plantando falla en secciones más pequeñas”. Hasta ahora su terreno eran las infantiles, pero desde que ha dado el salto a las grandes prefiere el lenguaje adulto. «Tengo más cosas para contar», concluye.

Neus Navarro
Publicado en La Vanguardia

  1. Pedro Macías Says:

    Una gran Artista Fallera💥🔥👋👋👋

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