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Carta abierta a las parlamentarias valencianas Pacto de Sororidad

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Estimadas compañeras de Les Corts Valencianes, Señoras diputadas:

Las construcciones que han hecho y deshecho la historia de nuestra sociedad y, por tanto, de la política, son difíciles de desvirtuar. Las sinergias del androcentrismo arrastran incluso cuando no hay una voluntad de actuar de esta manera. El pasado jueves 11, día de la constitución de Les Corts Valencianes, lo vivimos y constatamos con una Mesa únicamente compuesta por hombres.

Días antes había habido un pacto donde se dijo que, con el comienzo de una nueva legislatura, era deseo de todo el mundo no dejar ninguna fuerza política sin representación en la Mesa. Sin embargo, vivir en parámetros donde la perspectiva de género todavía no está efectivamente implementada ni fuera ni dentro de nuestra cámara, impidió la presencia de la mujer, de las mujeres, en esta mesa.

Les Corts de la IX Legislatura, Les Corts del cambio, son donde más mujeres han entrado respecto de las anteriores. Símbolo de este cambio fue reflejado en la Mesa de Edad, donde las dos diputadas más jóvenes en estar presentes fueron dos mujeres, María Bernal Talavera y Covadonga Peremach Palomares, y el más mayor un hombre, Fernando González Delgado.

Con esta carta quiero hacer realidad una de las primeras cosas que pensaba necesarias dentro de nuestra institución, la cual representa al pueblo valenciano y, por tanto, a las mujeres valencianas. No pensaba que tuviese que escribirla con tanta prontitud pero la realidad es la que es: necesitamos ya, desde los inicios, un pacto de mujeres, un pacto de sororidad dentro de nuestra cámara.

Este pacto no es más que el fruto de la apuesta por el enriquecimiento que suponemos las mujeres y nuestra perspectiva, sin ninguna otra interpretación. Los pactos suelen dar aún más legitimidad a las acciones y más fuerza a las causas, a las luchas y a las acciones. Por eso, un pacto de sororidad nos ayudará a tener todavía más fuerza y más legitimidad a la hora de llevar a cabo esa tarea que, aunque haya de hacernos aportar aún más energías al trabajo de hacer políticas, es necesario que llevemos a cabo: me refiero a la tarea de integrar la perspectiva de género a cada una de las acciones que se desarrollan en nuestras instituciones.

El simple hecho de nacer mujer nos dota de legitimidad para reclamar aquello que es nuestro, pero un acuerdo de sororidad nos dotará de más fuerzas. Es necesario que las mujeres de Les Corts firmemos este acuerdo porque, en un mundo diverso pero desigual, hay cosas que nos separan pero otras que nos unen.

Con este acuerdo las mujeres de la cámara nos unimos, más allá de que posteriormente lo hagamos con los hombres de cada uno de nuestros grupos parlamentarios, para estar juntas en el trabajo de crear esa conciencia de género tan necesaria dentro de nuestra cámara y dentro de nuestros correspondientes grupos parlamentarios, con tal de contrarrestar las sinergias históricas que, sin que necesariamente haya voluntad de caer en ellas, muchas veces nos arrastran hacia el androcentrismo. Con este pacto las mujeres de Les Corts nos damos apoyo en:

– No permitir y censurar cualquier comentario, actitud o menosprecio machista, por razón de sexo, orientación sexual o identidad de género en nuestra cámara.

– Construir que las decisiones de cualquier índole se den en las reuniones oficiales para conseguir una conciliación personal, laboral y familiar igualitaria, justa y real y efectiva.

– Construir la representación paritaria en los órganos de Les Corts. – Construir la perspectiva de género en las políticas.

– Construir un lenguaje que nos visibilice y que no sea sexista.

Los cambios y las regeneraciones no podrán llamarse cambios y regeneraciones si esto no se cumple. Y un pacto entre nosotras nos hará obtener más fuerzas en la tarea no solo de hacer políticas para las valencianas y valencianos, sino para hacerlas alejándonos, visibilizando y creando conciencia en nuestro alrededor sobre el hecho de que el androcentrismo continúa siendo todavía tentador a causa de la facilidad que hay en caer en él.

Espero que recibáis con buenos ojos este pacto que he llamado el pacto de sororidad valenciano y que nos unamos todas a él.

Cordialmente,

Cristina Cabedo Laborda
Diputada de Les Corts Valencianes por PODEM/PODEMOS.

Se adhieren:

Covadonga Peremarch Palomares, PODEM/PODEMOS.

Fabiola Meco Tébar, PODEM/PODEMOS.

Beatriz Gascó Verdier, PODEM/PODEMOS.

Sandra Mínguez Corral, PODEM/PODEMOS.

Llum Quiñonero Hernández, PODEM/PODEMOS.

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