¿De verdad vamos a seguir comprando a través de Amazon?
Asqueroso. Jeff Bezos se convirtió en el hombre más rico de la Tierra mientras espiaba, pagaba mal y maltrataba a sus trabajadores. Debemos construir un poderoso movimiento sindical para hacer frente a la clase multimillonaria y finalmente decir basta. No pueden tenerlo todo. Bernie Sanders (2020)
El infierno antiobrero y distópico de Amazon (¡recordemos que el patrimonio de su mayor accionista, Jezz Bezos, se aproxima a los 200 mil millones de $USA, la sexta parte, aproximadamente, del PIB español [1]!) puede describirse sucintamente así [2]:
1. Amazon [A., a partir de ahora] ha creado una extensa infraestructura de control y vigilancia de sus trabajadoras y trabajadores que pone bajo un intenso escrutinio a cada uno de ellos. Rastrea todos sus movimientos. Todos. Recurre a métodos cada vez más invasivos y crea condiciones excepcionalmente opresivas (recordemos Metrópolis de Fritz Lang).
2. A ha equipado sus cámaras de seguridad con inteligencia artificial sofisticada para asegurarse de que los trabajadores/as cumplen con las medidas de distanciamiento social impuestas por la pandemia del covid-19. Pero la función principal de esas cámaras, instaladas en todos los almacenes de la corporación, es impedir los robos y controlar que los trabajadores/as se dediquen únicamente a sus funciones (es decir, currar, currar y currar).
3. El sistema de vigilancia va más allá de los almacenes: hay también ‘software’ de navegación utilizado para recomendar las rutas a los conductores y monitorear su camino para garantizar que sigan la ruta sugerida por la empresa. Eficacia, productividad, a costa de lo que sea. Ningún margen de maniobra: total robotización del trabajo.
4. El ‘software’ (programado, como decíamos, para minimizar la libertad de la trabajadora o el trabajador y la toma individual de decisiones) también controla que los obreros y obreras no se detengan de más en los descansos: uno de 30 minutos para comer y dos más de 15 minutos (una hora en total).
5. Los conductores deben entregar a tiempo 999 pedidos de cada 1.000 (¡no es un error: el ¡99,9%!!) bajo amenaza de despido. Consecuencias inevitables: aumento de velocidad en las carreteras, accidentes de tráfico laborales, estrés, miedo, tensiones, etc.
6. Los trabajadores/as no pueden llevar al almacén cosas propias aparte de una botella de agua y una bolsa de plástico transparente con dinero. Al final de la jornada se les somete a un minucioso examen que es obligatorio para asegurarse de que no roban ningún artículo del almacén. El control puede durar de 25 minutos a una 1 hora del tiempo libre del trabajador/a ¡por el que no se les paga!
7. A. envía tareas a los empleados -como recoger un pedido para empacarlo y enviarlo al cliente- mediante un sistema electrónico de control y utiliza escáneres de artículos para contar incluso los segundos que pasan entre el cumplimiento de cada tarea. Si el trabajador/a es más lento de lo establecido por el programa, el sistema le manda un aviso, una advertencia que incluso puede conllevar el despido: no vales, no eres nadie, no eres productivo, ¡a la p. calle!
8. Según comentarios de una de las trabajadoras, no entienden bien cuánto tiempo se les asigna para completar cada tarea, una cifra que la compañía cambia «entre bastidores» y sin avisarles. «Lo sabes cuando te llegue un aviso. No te dicen qué indice tienes que alcanzar al principio. No sabes lo que va a pasar. No sé qué tareas terminé esta semana, ni si alcanzo el índice la próxima semana o si este va a cambiar. Y los coordinadores te están observando y acercándose a ti todo el tiempo. Te sientes como si alguien te estuviera observando mientras duermes».
9. A. ha patentado una pulsera ultrasónica que «puede rastrear con precisión dónde ponen sus manos los empleados del almacén». Vibra para que se dirijan en dirección necesaria.
10. Los mismos trabajadores se comparan con «zombis» y su entorno laboral con la trama de ‘El señor de las moscas’ (William Golding). ¿Por qué? Por muchas razones; una de ellas: por la práctica de la corporación de desprenderse cada año de «los más débiles», de “los perdedores”. Nazismo asociado a un capitalismo despótico.
11. ¿Y los sindicatos? ¿Qué hacen, qué pueden hacer los sindicatos? A. hace todo lo posible y lo imposible para impedir su aparición. ¿Cómo? No se permite hablar con los compañeros. Si lo hacen, los jefes se acercan y les amenazan con traslados a una estación diferente. Aislamiento obrero, esa es la consigna de A.
12. Dos polémicas ofertas de trabajo [3] que A. se ha visto obligado a retirar (llamaran la atención de los medios y generaran una gran controversia en EE.UU): en la descripción del puesto de analista de inteligencia de la corporación, se incluyó el requisito de detectar «amenazas de organización laboral [sindicatos] contra la compañía», informar a los altos ejecutivos del gigante del comercio electrónico y participar en la compilación de evaluaciones para su posterior uso en las demandas judiciales, «incluso órdenes de restricción contra grupos de activistas». Para un puesto de analista senior había un requisito similar en cuanto al activismo sindical, con la precisión de que las evaluaciones de inteligencia se utilizarían «para demostrar en la corte que los grupos de activistas tienen la intención de continuar la actividad ilegal respecto a A». Bernie Sanders ha tachado de «asquerosa» la actitud de la empresa.
¿De verdad, compañeras (también compañeros), que vamos a seguir comprando a través de la distopía antiobrera de Amazon? ¿No se impone organizar un boicot a esta corporación maléfica? Además de otras campañas, el boca a boca puede funcionar.
Notas.
2) “Antiutopía de Amazon: vigilancia masiva, lucha contra los sindicatos y otras revelaciones de un nuevo informe. “ https://actualidad.rt.com/actualidad/365422-amazon-vigilancia-empleados. Daniel A. Hanley & Sally Hubbard “Eyes Everywhere: Amazon’s Surveillance Infrastructure and Revitalizing Worker Power” https://static1.squarespace.com/static/5e449c8c3ef68d752f3e70dc/t/5f4cffea23958d79eae1ab23/1598881772432/Amazon_Report_Final.pdf
3) “Amazon retira una polémica oferta de empleo en la que requería informar sobre «amenazas» sindicales”. https://actualidad.rt.com/actualidad/365237-amazon-ofertas-trabajo-amenaza-sindical
Rosa Guevara Landa
Artículo publicado en Rebelión
