Los obsesos del lenguaje
Considero (o, al menos hasta ahora, consideraba) a Julio Llamazares un señor culto y con capacidad de pensamiento. Me sorprende, pues, que se lance a la palestra para proclamar lo mal que le sienta que Irene Montero se declare “portavoza”. Cierto que los neologismos de todo tipo -y concretamente los que inventamos buscando un lenguaje […]