
Ayuso está nerviosa, y con razón
España se presenta como la excepción: casi el único país europeo donde la extrema derecha no es la primera o la segunda fuerza política. Así ocurre en Francia, en Alemania, en Italia, en Bélgica, en Portugal, en Austria, en Suecia, en Rumanía… Se supone que esa ola reaccionaria aún no ha llegado tan lejos en […]